En el 2019, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, utilizó un informe para amenazar con el aumento de aranceles a vehículos importados en que se mencionaba más de un total de 40 veces a México, a la vez apuntaba a que Estados Unidos podría perder la capacitación especializada y el conocimiento en este sector, además señalo que los traslados de centros de Investigación y Desarrollo (I + D) a México, podrían ser una amenaza para la seguridad nacional.
El Departamento de Comercio, realizó un informe, este cuenta con varias partes censuradas, menciona más de 40 veces a México, el doble que a China, 4 veces más que a Canadá y 30 veces más que Alemania.
Dentro de los datos oficiales del Gobierno mexicano, se encontró que casi 90 de las 100 principales compañías de suministro del sector del automóvil operan en el país latinoamericano, lo que ha permitido que la producción de elementos con un alto valor añadido se haya multiplicado en los últimos años.
De igual forma, México es el país elegido cada vez más por los principales fabricantes de automóviles del mundo para instalar centros de Investigación y Desarrollo (I + D) y que la industria estadounidense “considera a los licenciados en México tan capacitados para el trabajo I + D como los de Estados Unidos.
Por ello, la transferencia de centros de I+D a México supone “la perdida de capacitación especializada y conocimiento de producción en Estados Unidos” lo que impide a la vez “la capacidad de los fabricantes estadounidenses para acceder a la mano especializada y tecnologías avanzadas” que actualmente son factores claves para el país estadounidense.
Por razones de seguridad nacional, se defendieron la imposición de aranceles aduaneros de entre el 25% y el 35% a los vehículos importados, pero la Administración de Donald Trump se negó a publicarlo a pesar de que la ley obligaba al Gobierno de Estados Unidos a hacerlo a inicios del año pasado, enero 2020.
El senador republicano Pat Toomey, criticó a la Administración Trump y dijo que era “totalmente inaceptable” que no cumpliese la ley y se negase a publicar el informe. De igual forma señaló en un comunicado que las afirmaciones de Donald Trump, respecto a “la industria del automóvil estadounidense es básica para el desarrollo y producción de vehículos militares en el país que la significante importación de vehículos durante las pasadas tres décadas ha debilitado gravemente el sector del automóvil de Estados Unidos por la reducción de la producción domestica” son tan injustificadas que incluso autores estaban demasiado avergonzados como para permitir su publicación.