En el proceso de modernización del Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), se analizaron áreas productivas que podrían generar mayores oportunidades de desarrollo económico en los tres países. Derivado de esto se identificó a las pequeñas y medianas empresas (pymes) como actores relevantes, no sólo por su aportación al Producto Interno Bruto (PIB), sino por la gran cantidad de empleos que generan, además de su flexibilidad de adaptación a las nuevas tecnologías.
En San Antonio Texas se inició el dialogo de Pequeñas y Medianas Empresas del T-MEC que involucran a representantes de las tres naciones para fortalecer el comercio y la inversión regional con el T-MEC para esta área de oportunidad y ayudar a que más pequeñas empresas se beneficien del tratado de libre comercio.
Los temas de discusión incluyeron los recursos comerciales de las pequeñas empresas para exportar e importar bajo el T-MEC; pequeñas empresas que comparten las mejores prácticas para el comercio en los Estados Unidos, Canadá y México y recursos de recuperación de covid-19 para pequeñas empresas.
En 2021 la participación de las pequeñas empresas sumo casi 1.2 billones tras el comercio de bienes y servicios entre los tres países, lo cual deja en claro la fuerte participación de estas empresas y la importancia de apoyarlas en las importaciones y exportaciones realizadas.
El Capítulo 25 del T-MEC reconoce el papel fundamental que tienen estas compañías para mantener el dinamismo y la competitividad comercial de sus respectivas economías, por lo que buscarán promover el crecimiento y empleo de estos negocios.
Los integrantes del T-MEC se comprometieron a generar las condiciones necesarias para que las pymes tengan oportunidades similares de participación en el comercio internacional que las empresas multinacionales.
Asimismo, los países deberán promover la incorporación de estos negocios a las cadenas globales de valor (CGV), partiendo desde una perspectiva de integración a cadenas de suministro regionales.