Israel se ha caracterizado por ser uno de los países más importantes en cuanto a producción y generación de tecnologías de ciberseguridad a nivel mundial, hacia finales del 2018 ya se habían creado 752 compañías dedicadas a esto, de las cuales 421 se mantenían activas, 213 dejaron de operar y 118 fueron adquiridas por otras empresas o corporativos.
En 2017, las exportaciones en materia de ciberseguridad de Israel llego a los 6,000 millones de dólares, tomando en cuenta las exportaciones hechas por compañías públicas, compañías israelíes relacionadas con la ciberseguridad, centros de investigación y desarrollo de compañías extranjeras como IBM y Microsoft y compañías privadas.
Así mismo, entre 2013 y 2018, la suma de levantamientos de capital en este rubro alcanzo los 3,900 millones de dólares, con un total de 501 rondas de financiamiento, demostrando el gran valor económico que tiene este sector para el país.
Israel alberga las principales empresas a nivel mundial en el área, destacando CHEQ, CropX, MDClone, MyndYou y Phinergy, las cuales están catalogadas como actores de vanguardia en la industria.
Aunque la industria tecnológica es bien catalogada, en el último mes se han generado diversos escándalos a nivel mundial, ya que ciertos países han abusado de la tecnología creada por las empresas israelíes para espiar a civiles en lugar de cumplir con el objetivo por las que son creadas.
Se reportó que distintos gobiernos como el de Arabia Saudita y México han utilizado el software Pegasus de NSO, el cual es un malware que permite a los clientes acceder al teléfono móvil de un objetivo, para lograr piratear los teléfonos celulares de periodistas y disidentes.
Así mismo, los empleados del Departamento de Estado de Estados Unidos también fueron pirateados por el software Pegasus, logrando que la nación incluyera a NSO a su lista negra a principios del mes de diciembre.
Debido al gran número de inconvenientes, Israel anuncio que mantendrá y reforzara una supervisión constante sobre la venta de exportaciones de productos y/o servicios de ciberseguridad, para evitar que los distintos países que los compran hagan un uso inadecuado de ellos.
Además del aumento de la supervisión por parte de Israel, se señaló que los países que quieran adquirir tecnología israelí deberán firmar una declaración en donde se comprometan a usar la ciberseguridad únicamente para la investigación y prevención de actos terroristas y delitos graves.
Si es que no se llega a cumplir con las condiciones de declaración firmada, los países infractores tendrán prohibido utilizar las tecnologías creadas por Israel, además de que serán acreedores a multas o sanciones.
Israel ha tenido que hacer empleo de la declaración para evitar más escándalos y problemas mundiales, ya que prácticamente esta nación fue la que genero la tecnología, así mismo es prudente que existan normas y condiciones sobre la utilización/empleo de tecnología de seguridad para que sean respetadas y acatadas.