El pasado año, la balanza comercial arrojó datos en la que las exportaciones petroleras fueron las más altas, con un 64.8% de las exportaciones totales, las agropecuarias con un 25.2% y las manufactureras con un 26%.
Para este año 2022, el volumen exportado de carne de res incrementó un 82% (hasta el 22 de enero) en comparación con los datos registrados del mismo periodo del año pasado.
El Mexican Beef reportó que se enviaron 24,680 toneladas de carne de res hacia Estados Unidos, esto posicionando a nuestro país como principal proveedor de carne de res superando a Canadá.
Como bien es sabido, Estados Unidos es uno de los mayores líderes de la industria cárnica, en este país se encuentran grandes empresas industrializadas modernas de producción, empaquetado, preservación y la comercialización de carne. Pero, como otros de los efectos del presente Covid – 19 y la reciente variante Ómicron, el país se ha visto afectado. Algunos informes revelan que “la tasa de desempleo en EE. UU. se acerca a mínimos históricos y la demanda de bienes está provocando un aumento de las importaciones”. Este creciente nivel de importaciones contribuyó a un déficit comercial de 80.200 millones en diciembre del año pasado. Esto trajo como beneficio a los países, principalmente China, vendiendo a los consumidores estadounidenses 28.400 millones de dólares más de lo que compraba; la Unión Europea, de 19.400 millones; México, con 11.000 millones; Alemania, con 6.100 millones; y Canadá, con 5.400 millones.